Inicio / Desayuno
Waffles Caseros Clásicos: La Receta Definitiva para un Desayuno Esponjoso y Versátil
Aprende a preparar waffles clásicos, esponjosos y deliciosos en casa con esta receta adaptable a tus gustos.

Al visitar casi cualquier lugar de desayuno, es casi seguro que encontrarás waffles en el menú. No solo son un plato clásico, sino que también son increíblemente esponjosos y deliciosos. Aunque los waffles vienen en una variedad de sabores, siempre se caracterizan por sus inconfundibles divisiones cuadradas, perfectas para atrapar el jarabe de arce y asegurar una dulzura extra en cada bocado.
La reconocida desarrolladora de recetas, Erin Johnson, ha creado esta receta sencilla para waffles clásicos que saben exactamente como los que pedirías en tu restaurante favorito. Sin embargo, hay algo verdaderamente especial en poder prepararlos en la comodidad de tu propio hogar. “Estos waffles apenas requieren tiempo para hacerse y se sienten como algo realmente especial”, comenta Johnson con entusiasmo. Otra gran ventaja de esta receta es que puedes personalizar la masa a tu gusto. “Puedes usar esta receta como punto de partida para cualquier ingrediente adicional que te apetezca. Las chispas de chocolate, los frutos secos y la fruta fresca funcionan de maravilla”, señala Johnson.
Sigue leyendo para aprender a preparar estos waffles clásicos que se convertirán en los favoritos de tu hogar.
Reúne los Ingredientes para tus Waffles Clásicos
Hacer waffles es una tarea fácil y económica, ya que utilizan ingredientes comunes que probablemente ya tienes en casa. Para esta receta en particular, necesitarás harina, polvo para hornear (levadura química), azúcar, huevos, mantequilla sin sal (o con sal, según tu preferencia), leche y esencia de vainilla para añadir un toque de sabor extra.
Una vez que tengas todos estos elementos, estarás listo para crear estos sencillos y clásicos waffles.
Combina los Ingredientes Húmedos y Secos
Comienza mezclando la harina, el polvo para hornear y el azúcar en un recipiente mediano. En otro bol, combina los huevos, la mantequilla derretida, la leche y la vainilla. Luego, vierte los ingredientes líquidos en el mismo recipiente que los ingredientes secos. Un punto importante a tener en cuenta es que “cuando mezcles los ingredientes, revuelve hasta que todos los ingredientes secos se incorporen por completo, pero evita mezclar en exceso. Habrá algunos grumos, y eso es perfectamente normal”, aconseja Johnson. Los grumos son señal de una masa no sobre-trabajada, lo que contribuye a la textura esponjosa final.
Deja la masa reposar a un lado por unos minutos. Este tiempo de reposo es clave para desarrollar una textura óptima.
Prepara tus Waffles en la Wafflera
Ahora es el momento de precalentar tu wafflera. “Caliento la wafflera después de mezclar la masa porque creo que el tiempo de reposo produce los waffles más esponjosos”, explica Johnson. Una vez que la wafflera esté bien caliente, vierte una porción de la masa y cocina el waffle hasta que adquiera un hermoso color dorado. Repite los mismos pasos con el resto de la masa.
Esta receta rinde aproximadamente 8 waffles, aunque la cantidad puede variar. “Cada wafflera es un poco diferente, al igual que el tiempo de cocción, y la cantidad de waffles dependerá de tu equipo”, señala Johnson. “Para mí, esto rinde 8 waffles en una wafflera de 4 secciones”. La clave es observar el color y la textura para saber cuándo están listos.
Sirve y Disfruta: La Cúspide de tus Waffles Caseros
Una vez que hayas terminado toda la tanda de waffles, lo único que queda es emplatar y servir con tus acompañamientos favoritos. Puedes optar por los aderezos clásicos como mantequilla y jarabe de arce, o puedes innovar un poco y añadir un toque de azúcar glas en polvo o crema batida. Si te sobran waffles, o si deseas prepararlos con antelación, es una excelente idea. “Cualquier waffle sobrante puede ir al congelador para recalentar fácilmente. Simplemente mételos en la tostadora como lo harías con waffles congelados comprados en la tienda”, recomienda Johnson.
Celebremos juntos esta receta de desayuno clásico y atemporal. La versatilidad y la facilidad de estos waffles los convierten en una opción perfecta para cualquier momento, desde un desayuno tranquilo de fin de semana hasta un brunch especial.
Resumen de la Receta de Waffles Clásicos y Sencillos
Esta receta de masa para waffles clásicos produce los waffles más esponjosos y es la base perfecta para cualquier personalización o aderezo. Siguiendo los sencillos pasos de mezclar los ingredientes secos y húmedos por separado, combinarlos con cuidado para evitar el exceso de batido (aceptando los grumos), y cocinarlos en una wafflera precalentada tras un breve reposo, lograrás waffles dignos de restaurante en tu propio hogar. Disfruta de la flexibilidad para añadir tus extras favoritos y no dudes en congelar las sobras para un desayuno rápido en el futuro. ¡La nutrición de tus waffles variará según los ingredientes y aderezos que elijas, haciendo de cada bocado una experiencia única!